A través de nuestro trabajo como anfitriones de refugios de montaña, hemos desarrollado una conexión especial con Nepal, su tierra y su gente. Hace unos cuatro años, a través de mil vueltas del destino, conocimos a Sonam. Se postuló como camarero en el Almtalerhaus, y después de una entrevista por Skype con él en Katmandú, sentimos inmediatamente una conexión. Desde entonces, hemos sido un equipo inseparable, y Sonam ha traído consigo a algunos buenos amigos más para unirse a nosotros.

Nunca habíamos tenido empleados tan maravillosos, cálidos y trabajadores. Desde el principio, nos impresionó el entusiasmo y la energía que los chicos ponen en su trabajo. Tenemos un ambiente laboral familiar y constantemente compartimos bromas. Incluso en los momentos de mayor estrés, Sonam y su equipo mantienen la calma y siempre tienen una sonrisa en el rostro. ¿Será por su crianza budista o por las duras condiciones de vida en las que crecieron? No lo sabemos. Pero Sonam, Pasang, Dawa, Lhakpa y Pasang son algunas de las personas más resistentes, fuertes, divertidas y amorosas que hemos conocido.

Eso sí, los nombres son un pequeño desafío para nosotros. Tradicionalmente, los sherpas reciben nombres según el día de la semana en que nacieron o nombres religiosos, y su apellido siempre es Sherpa. Esto a menudo lleva a que haya muchos nombres iguales, lo que ha generado bastantes confusiones graciosas para nosotros.

Pero, ¿cómo alguien que vive en la caótica metrópolis de Katmandú termina postulándose para trabajar en un refugio de montaña en Alta Austria? No es precisamente lo más obvio, ¿verdad? :)

Lo llamamos destino, o tal vez casualidad. En nuestro segundo refugio, el Almtalerhaus, ya estábamos teniendo problemas para encontrar personal. Cualquiera que trabaje en el sector de la gastronomía conoce bien el problema. Estos trabajos ya no son muy atractivos para las generaciones más jóvenes. Aunque el salario es excelente (al menos con nosotros), el trabajo a menudo es muy estresante, y parece que eso no gusta mucho hoy en día.

Para resumir, decidimos anunciar la oferta de empleo en una plataforma europea para trabajos de gastronomía y refugios de montaña. Al mismo tiempo, Sonam trabajaba para una reconocida agencia suiza de trekking y montañismo en Katmandú. Su jefe, al ver el potencial de Sonam, le recomendó un sitio web con ofertas de empleo en Europa, donde el trabajo de temporada permite ganar muy buen dinero. Así fue como Sonam llegó a nuestro refugio y cómo nos encontramos.

Destino o como quieran llamarlo: desde entonces no solo somos un equipo, sino también buenos amigos. Incluso pasamos unas semanas en Nepal, y ese viaje fue realmente inolvidable para nosotros. Tuvimos el privilegio de visitar a las familias de nuestros empleados y amigos, y conocimos Katmandú y el resto de Nepal (un relato detallado del viaje sería demasiado aquí; más adelante en el blog) desde una perspectiva completamente nueva.

Cada temporada, hemos recolectado donaciones con entusiasmo, y la generosidad de las personas ha sido a menudo asombrosa. Tuvimos la oportunidad de entregar estas donaciones directamente, junto con Sonam, y fue realmente conmovedor: una experiencia que nunca olvidaremos.